Radio Che Guevara

¡Porque no alcanza!

“Con nuestros derechos y nuestros salarios, no se jode”

12 de Marzo de 2014. Por Equipo de Comunicación CTA Rosario | En el marco de la Jornada Nacional de Lucha de la CTA, en Rosario se realizaron 5 cortes y un acto central sobre la Autopista a Santa Fe, frente a la fábrica Liliana, donde se exigió la reincorporación inmediata de 12 obreros despedidos. Además de la CTA se hizo presente la CGT San Lorenzo, que convocó a un paro de 10 a 12 horas mañana en defensa de los puestos de trabajo de los metalúrgicos y los municipales de Fray Luis Beltrán.

Alrededor de las 11 de la mañana, las banderas coparon el frente de Liliana. A la par, en diferentes puntos de la Avenida Circunvalación y en el centro rosarino se producían cortes de calle que visibilizaron el grito de que al ajuste no lo van a pagar los trabajadores.

“El gobierno asumió el plan económico de los devaluacionistas y es nuestra tarea organizarnos y luchar contra eso. El 11% de aumento a los Jubilados, el 22% en la paritaria nacional docente, los dichos en la UIA pidiendo límites a la paritaria son hechos que, traducidos, significan que la Presidenta quiere que seamos los trabajadores los que paguemos el ajuste” aseguró el Secretario General de la CTA Rosario, Gustavo Terés.

Respecto a los dichos de la primera mandataria en torno de la legislación “antipiquetes”, el dirigente afirmó: “sabemos de la necesidad de luchar en la calle, del ejercicio democrático de esta protesta que la Presidenta pretende cercenar. Parece una gobernante de la década de los ´90 cuando habla de obstruir el paso, cuando en realidad debería discutirse por qué se cercenan derechos, por qué no se tienen políticas en materia de protección de los puestos de trabajo, hay persecución sindical, como en el caso de los compañeros de Liliana. Las preocupaciones democráticas tienen que estar en función de defender a los sectores más postergados. Hoy quienes viven sólo con los ingresos de los planes, sin posibilidad de conseguir empleo alguno o subcontratados a modo de cooperativas, están totalmente avasallados”.

Además de la exigencia de reincorporación de los trabajadores de Liliana, y el desprocesamiento de los miembros de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), judicializados por luchar, en las actividades de hoy, confluyeron los reclamos de los sectores ocupados y desocupados. Al salario mínimo, vital y móvil de $9000, el 82% móvil a los jubilados, la conservación de los puestos de trabajo, entre otras consignas levantadas a nivel nacional por los gremios de la Central, se sumaron como en cada acto las exigencias de los sectores más postergados, como la actualización de las asignaciones sociales, la ejecución en Santa Fe de planes de trabajo y de inserción de los jóvenes a nivel laboral y estudiantil mediante becas.

“Es una jornada que plantea reclamos de las organizaciones sociales, sindicales, de la sociedad toda, que espera que la democracia, la Constitución Nacional, que el Artículo 14 bis llegue a los lugares de trabajo. La madre de todas las batallas se da ahí en los lugares de trabajo, donde somos mayoría”, subrayó el Secretario Adjunto de CTA Rosario, Gustavo Martínez.

Unidad de acción

La CGT San Lorenzo se convocó de forma urgente anoche y convocó un paro de 10 a 12 horas en los lugares de trabajo, “en solidaridad con los compañeros de Liliana y los municipales que están de paro en Fray Luis Beltrán. Aprovechando además, estas horas de paro para discutir en asambleas en los lugares de trabajo quiénes creemos que deben pagar el ajuste: si los trabajadores, las empresas exportadoras, o el gobierno”, adelantó Edgardo Quiroga, Secretario General de la CGT San Lorenzo. Este sector viene participando activamente en la acción solidaria con los despedidos de Liliana y se mantiene en alerta ante posibles despidos o suspensiones en el Cordón.

“El gobierno sigue obstinado en profundizar la sintonía fina. No les bastó el dólar a ocho pesos, ahora necesitan parar la inflación, para eso buscan achicar el mercado interno, para lo cual necesitan arrodillar a las organizaciones sindicales nacionales con paritarias que estén debajo del 24 o 25%. O un 30% en la UOM, pero sobre un básico de $3800, por lo que no se le va a garantizar siquiera un sueldo básico de $5500 al trabajador. Esto forma parte del debate, y si esto no se logra revertir con resistencia del movimiento obrero, comenzarán las suspensiones y despidos”, presagió Quiroga, quien destacó la unidad de las diferentes centrales obreras como requisito necesario para hacer frente al ajuste.

En el mismo sentido opinó Martínez, quien consideró que “estar cortando la autopista frente a Liliana es el mensaje más claro que deben recibir los trabajadores: no hay que pelear solo, porque hay infinidad de organizaciones dispuestas a solidarizarse. La patronal nunca va a entender por qué los cortes se sostuvieron también con estudiantes. Es porque no entienden la historia. Ojalá volvamos a esa Rosario digna, como la que salió a la calle tras el asesinato de un metalúrgico, de menos de 20 años, de apellido Blanco. Esa Rosario salió a la calle a decir ‘con los trabajadores no’ y ‘no se metan con los pibes’”.

Por su parte, los obreros de Liliana valoraron la realización del acto frente a la planta y consideraron que el conflicto pasó a una segunda etapa. “Los trabajadores se encuentran en asambleas, intentándole arrancar un paro a este sindicato traidor que se puso del lado de la patronal y salió a la calle pidiendo represión”, aseguró Abraham Belloso, delegado despedido por la patronal y desplazado por la UOM. En el día de hoy y ante la amenaza de descontar los días de paro, los obreros que permanecieron tres semanas apoyando la reincorporación ingresaron a la planta de Baigorria, donde realizaron asambleas. “Esto es una lucha porque somos una amenaza, porque el ejemplo se extiende en otras plantas metalúrgicas y otros sectores”, ponderó Belloso.

Como cada vez que sale a la calle, la CTA construyó en unidad de acción por el respeto a las conquistas adquiridas y las que quedan por adquirir. “Y una advertencia muy clara a las patronales estatales y privadas: con nuestros derechos y nuestros salarios no se jode”, concluyó Martínez.